En general, la imagen que tenemos de nosotros mismos juega un papel muy importante en nuestro estado de ánimo y en nuestra autoestima. Y ante enfermedades como el cáncer y los tratamientos de quimioterapia, esto se confirma. La caída del cabello supone, cuanto menos, un cambio radical en nuestro aspecto que puede afectarnos a nivel psicológico y físico. Por este motivo, soluciones como las prótesis capilares en los procesos oncológicos son de gran ayuda. ¿Quieres saber por qué y conocer un testimonio real que puede ayudar a muchas otras personas? Te lo contamos en este nuevo post.
La caída del cabello: cómo influye mantener la apariencia y la autoestima
Los tratamientos de quimioterapia suelen provocar una rápida caída del cabello: puede ocurrir en apenas dos semanas tras el primer tratamiento y el impacto visual resulta muy fuerte.
El golpe que esto supone en ocasiones afecta a un estado de ánimo que ya es delicado. Perder la apariencia propia de la noche a la mañana y por unos meses puede generar una bajada de autoestima que desde luego no suma al seguimiento del tratamiento.
Las soluciones estéticas como las prótesis capilares en procesos oncológicos permiten reducir notablemente este impacto: al mantener la imagen, la persona gana en confianza y seguridad. Se elimina, por tanto, una visión propia negativa y se facilita el llevar a cabo una vida social lo más normal posible. Y si la persona no quiere, nadie tiene por qué saber que se ha quedado sin cabello o que está en un proceso oncológico. Especialistas de psicología y de oncología, pero sobre todo quienes han vivido esta situación, aseguran que la apariencia tiene más importancia de la que imaginamos para afrontar enfermedades tan complicadas.
El bienestar de los pacientes hace que el tratamiento sea más llevadero, que lo siga con un mayor ánimo y que se eviten posibles secuelas psicológicas.
Un caso real de prótesis capilares en los procesos oncológicos
En Rueber, nos resulta especialmente gratificante saber que ayudamos a nuestros clientes a afrontar estas situaciones. Por ello, supone una gran satisfacción haber recibido el caluroso agradecimiento de Vanessa López. Hemos vivido con ella una parte de su historia y estamos convencidos de que su testimonio puede ayudar a muchas otras personas.
Para ella, la pérdida del cabello era uno de los grandes problemas derivados de la enfermedad. Crear una prótesis capilar que imitara al máximo su pelo y apariencia habituales le ayudó a mantener la confianza en sí misma, especialmente al comprobar que nadie notaba la diferencia. En sus propias palabras, ella se veía mejor que nunca.
Las prótesis capilares fijas permiten hacer una vida absolutamente normal y se integran como si fueran una parte más de la cabeza. Nuestra clienta explica que nadie la ha llegado a ver sin cabello, ni siquiera ella misma: para ella, esto le ha sido de gran ayuda para sentirse bien consigo misma.
Las palabras que Vanessa dedica a nuestro equipo nos emocionan y queremos compartirlas contigo. Encontrarás el vídeo completo y conocerás su historia a continuación:
Prótesis capilares personalizadas para mantener la apariencia y la autoestima
En Rueber, creamos cada prótesis capilar de forma manual respetando al máximo la apariencia de cada persona. Tomamos las medidas exactas de la cabeza para la base de la prótesis, mechones para replicar la tonalidad del pelo y elegimos todas las características finales junto al cliente:
- Densidad capilar
- Largura
- Textura y ondulación
- Corte y peinado junto al equipo de estilismo
Las prótesis capilares se fabrican implantando los cabellos uno a uno sobre una fina base que imita la piel a la perfección: resulta transparente, flexible, resistente y se integra de manera natural.
La colocación de la prótesis es muy cómoda y puede mantenerse fija, con una sesión de mantenimiento al mes. Por sus características, la persona puede hacer una vida plenamente normal, ya que no hace falta quitársela para dormir, bañarse ni para realizar actividades deportivas.
El resultado final es imperceptible para el resto, pero también para el cliente. Esto garantiza un refuerzo en la autoestima del paciente, ya que no se produce un cambio de apariencia y la prótesis capilar se convierte en una gran ayuda emocional.
Si quieres saber más sobre esta solución capilar oncológica o tienes cualquier otra duda sobre los servicios de Rueber, ponte en contacto con nosotros. Te ayudaremos de manera atenta y lo más rápido posible.
En esta ocasión, queremos despedirnos dando las gracias a Vanessa por su espectacular testimonio y por su generosidad al compartir su historia con todos nosotros. ¡Mil gracias por esta dosis de energía!